El diario The Guardian ha publicado una nueva entrevista (por parte de una periodista bastante snob) a Jamie Dornan, donde habla muy poquito sobre 50 Sombras de Grey y las siguientes películas.
Traducción:
Lo único peor que hay aparte de una modelo/actriz, según el viejo chiste, es un modelo/actor. Puede que alguna vez haya estado de acuerdo con con esa broma, hasta que conocí a Jamie Dornan. Jamie y yo nos hicimos amigos hace exactamente una década, cuando él tenía 22 años y yo 26 y un amigo común nos presentó en una fiesta. Ninguno de los dos, para ser honestos, estaba en su mejor momento en aquella época. Él estaba con el corazón roto después del reciente final de su larga relación con Keira Knightley (pasó casi un mes antes de que yo consiguiera verle sonreír) y yo mientras tanto, estaba totalmente convencida de que la manera de exprimir la mayor parte de mis 20 años era estar borracha lo máximo posible y con la mayor frecuencia posible. Pero de alguna manera, a través de nuestras propias nieblas personales, encajamos.
Alguien me dijo al oído desde el principio que Jamie era un modelo, pero no le presté mucha atención a esta información. No fue hasta que fui a Nueva York para la semana de la moda unos pocos meses después de conocerlo y lo vi casi desnudo en una valla publicitaria gigante en un anuncio para Calvin Klein, cuando empecé a pensar si mi condescendencia podría haber estado un poco fuera de lugar. De hecho, mi nuevo amigo dulce y de palabrota fácil de Belfast era uno de los modelos masculinos con más éxito del mundo en ese momento, que trabaja para Dior Homme, Aquascutum, Zara, Armani y docenas de otros. Pero nunca lo habrías sabido al hablar con él: por mucho que traté de incitarlo citando a Zoolander, sólo se encogía de hombros, sonreía y cambiaba de tema. Nunca mencionó que había pasado el día, digamos, retorciéndose desnudo con Gisele o Eva Mendes para una sesión de fotos, como razonablemente podría haber hecho la mayoría de los hombres jóvenes, y después de 10 años de conocerlo no le he visto ni una sola una vez echarle un vistazo a su reflejo en un espejo o ventana. Nunca le he oído hablar de ir al gimnasio.
Ahora está casado con la compositora de cine Amelia Warner, y es padre de Dulcie, un bebé de 16 meses. Pero cuando estaba soltero, no era ni mujeriego ni ligón. Aunque algunas de mis amigas me hicieron saber claramente que estarían felices de hcer todo eso con él, simplemente parecía no tener interés en su aspecto, o los beneficios que podrían traer.
Hoy es la primera y única vez que he visto usar una prenda de vestir que es un regalo promocional; nos reunimos para esta entrevista en un café al oeste de Londres, y aparece después de haber salido directamente del campo de golf, con una gorra con el lema “Doble Bogey” en la visera. “Una empresa ropa de golf me lo dio; ¿No es genial? “, sonríe el ex rostro de Calvin Klein.
No era que se avergonzara de ser un modelo, exactamente, sólo que él sabía que quería ser algo más, y ese algo era, por supuesto, ser actor. Y para ser honesto, eso me desconcertó tanto como su afición por el golf. Yo solía pensar que cuando la gente decía que quería ser actor, que realmente quería decir que querían ser famosos. Pero Jamie no mostró ningún interés en nada de eso. Él es la única celebridad que he conocido que nunca presume de amistades importantes, incluso ahora que está trabajando con gente muy famosa. “Yo nunca creí que nada de eso fuera relevante”, dice, mirando con sorpresa que eso me parezca sorprendente.
Tiene un grupo de amigos que son actores (incluyendo Eddie Redmayne, Rafe Spall y Andrew Garfield), pero las únicas personas a las que siempre saca en la conversación son su padre y dos hermanas (su madre murió de cáncer cuando tenía 16 años) y al estrecho grupo de amigos de Belfast que conoce desde la infancia. No puedo imaginarlo de copas con escandalosos famosos en el exclusivo Club VIP Groucho, compitiendo sobre quién conoce mejor a Harvey Weinstein [famoso productor de cine americano]. ¿Por qué quiere ser actor? me pregunto. ¿Por qué no simplemente coger el dinero como modelo y pasar el resto de su vida en el campo de golf? Nunca se me ocurrió que podría ser porque era bueno actuando.
En 2013, finalmente me enteré de que lo había subestimado, cuando apareció como Paul Spector, el asesino psicópata en la aclamada serie BBC2 de Allan Cubitt, The Fall. Jamie, que era casi irreconocible para mí en ese papel, ganó rápidamente varios premios. “Ese programa me lo ha dado t-o-d-o”, dice, arrastrando con énfasis irlandés en la última palabra. “Es una importante muestra de jodida cultura y simplemente una delicia hacer. Sé que cada oportunidad que tenga de ahora en adelante se debe a The Fall”.
Una tercera temporada de la serie de suspense acaba de anunciarse, aunque el consenso de la crítica varió durante la última temporada, que fue duramente criticada por inverosimilitud del argumento. “Lo que sucede es que la serie ha tenido que desarrollarse y ampliarse. No puedes unicamente regurgitar lo que hiciste en la primera temporada. Pero entonces, el argumento de algunas personas es que debes parar después de la primera temporada“, dice Jamie. “Pero me encantaría volver a interpretar a Paul para siempre y una cosa que estoy aprendiendo es: ‘Ah, mierda, no se puede complacer a todos'”. Lo cual es difícil para ti, porque eres una persona a la que le gusta complacer a la gente, le digo. “Sí, exactamente. Y ahora he elegido un trabajo donde veo lo mucho o poco que complazco a la gente!”.
Hay, sin embargo, otro personaje que es tan poco parecido a Jamie como lo es el asesino en serie de The Fall; el Christian Grey de personalidad fría en 50 Sombras, obsesionado con el dinero y entusiasta del S&M. “Lo sé, lo sé, ese es el tema”, dice. “Me considero muy alegre, bastante fácil de llevar, y ¡sigo interpretando a enfermos cabrones psicópatas! Me preocupa a veces lo cómodo que estoy en esa zona”.
Cuando se anunció que había sido elegido para protagonizar la película 50 Sombras de Grey, le envié un mensaje para decirle que era la cosa más divertida que había oído nunca. “¡Yo todavía me siento de esa manera!”, se ríe. “Hay momentos en que pienso: “Eh, alguien ha hecho la película Cincuenta sombras, eso es gracioso. “Y luego me paro: ‘Espera, ¡¿soy el protagonista?!'”
No es fácil encontrar una manera discreta a pedirle a un amigo que te diga porqué está haciendo algo que tú encuentras hilarante pero, bueno, ¿por qué aceptó el papel? “Sabes, yo no soy ingenuo en lo que se refiere a por qué la gente pensaría que era una mala elección [en mi carrera], o por qué existe un esnobismo al respecto. Pero tampoco estoy estúpido, y yo sabía que con [la directora] Sam [Taylor-Johnson], y [el director de fotografía] Seamus McGarvey, la película iba a estar en buenas manos. Y, sabes, no te hace ningún daño participar en una película que ha conseguido una recaudación de más de 500 millones de dólares”.
Aparte de los momentos incómodos que suceden de vez en cuando, por supuesto: Jamie hace poco llevó a su hija Dulcie a unas actividades infantiles que se organizaban en su cine local. Mientras entraban, estaba acabando una proyección de la película 50 Sombras. Puso a su hija frente a su cara y la utilizó como una máscara hasta que estuvo seguro más lejos de los fans de Christian Grey.
La película, como era de esperar, ha sido un éxito comercial enorme, pero, tal y como era previsible, no un éxito de la crítica (“The Guardian es mi página de inicio del ordenador, pero por supuesto que yo puntuaría la película con una estrella!”, Se ríe). Pero en su defensa, es mil veces mejor que el libro; con más clase y libre de la diarrea verbal de E.L. James. The Daily Telegraph, a quien le gustó mucho la película, describió la actuación de Jamie como “un buen tipo de absurdo … una fría roca plana con ojos interrogantes”. (Jamie, sin embargo, prefiere citar sus malos comentarios.) Es una evidencia tanto para la película como para el actor que Christian Grey se ve como un personaje en absoluto teniendo en cuenta que en los libros él es poco más que un mensaje en clave. Casi me caí de la butaca del cine riendo cuando Jamie/Christian ruge: “Yo no hago el amor, señorita Steele – Yo follo. Duro”. Que seguramente significa algo, aunque tuve que taparme los ojos durante las escenas de sexo. “Así lo hicieron a mis hermanas”, dice. “Pero papá estuvo muy atento…”
Desde el estreno de la película, ha habido rumores de desacuerdos en el set de rodaje: que James y Taylor-Johnson se odian entre sí; que Jamie y su coprotagonista Dakota Johnson se detestan entre sí; que tanto Taylor-Johnson y Jamie están desesperados por salir de las dos próximas entregas. Jamie es demasiado discreto para hacer comentarios sobre las relaciones personales, pero ¿va a estar él a bordo en los dos próximos folla-maratones de Cincuenta Sombras?
“Ese siempre ha sido el plan”, responde con una respuesta cuidadosa. ¿Y la directora Taylor-Johnson? “El plan siempre ha sido que ella los haga, así que espero que eso suceda. Pero no creo que vaya a ser algo inminente”.
Más inminente son sus otros proyectos. Además de la próxima temporada de The Fall, tiene varias películas por estrenar, incluyendo dos películas de guerra que rodará este año, y un proyecto sin título que protagoniza junto con Bradley Cooper. No está nada mal para ese modelo de 22 años de edad, que quería actuar desesperadamente, ¿no? “Lo sé, lo sé”, dice sonriendo, dando un toque vergonzozo en su gorra. Pero, sinceramente, sigo pensando que estaría igual de feliz jugando al golf.
Fuente: The Guardian. Traducción: 50 Sombras Spain.
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